Y ESTAR ENAMORADO, DEBE SER MEJOR, QUE SER UN POETA.
Un poeta triste, que ve como pasan sus días sin una compañía a su lado, un poeta que se siente triste y vacío en un mundo donde los amores se ven en cada esquina. Estar enamorado sin duda, debe ser mejor que ser un poeta solitario, un poeta que solo escribe por soledad, que solo escribe porque quizás se siente solo. Quizás nadie lo entiende. Quizás la gente le habla solo porque le da pena. O quizás otra parte, en especial más la mayoría que la minoría no le hable, solo lo ignora. No me lo imagino, quizás estar enamorado es una nueva forma de vivir la vida. Dicen por ahí que te sientes feliz, que ves el mundo de otro plano distinto, encima he llegado a escuchar y esto verdaderamente no lo puedo creer, dicen que hasta inclusive llegas a sentir mariposas revoloteándose en tu estómago. Estar enamorado debe ser algo raro, porque tanto es así el efecto que a algunas personas les llega a cambiar su vida, ya sea para bien o para mal, a otras personas las vuelve idiotas.
ESTAR ENAMORADO DEBE SER ALGO MÁGICO, INCLUSIVE DEBE SER MEJOR QUE SER UN POETA.
*
*
(Erick Manuel Cisneros García)
Erick Manuel Cisneros García :B
23/07/13 Soy poeta y escritor romántico. Tengo 17 años. Soy de Cajamarca, pero vivo en Lima (Perú) (:
martes, 17 de septiembre de 2013
UNA PARTE DE MI LIBRO: EN MI MENTE ESTAS MUERTA PERO PARA EL MUNDO SIGUES VIVA.
Estaba callada. Después de varios días de angustia, después de varios días sin verla, después de pasarme días enteros esperando que llegara este momento. La espera por fin había llegado a su fin. Al fin la pude ver. Al observarla pude notar en ella, varias cosas diferentes, me di cuenta por ejemplo que le había salido un granito en la parte superior de su ojo izquierdo. Tenerla tan cerca a mí, pude también apreciar esa pequeña y perfilada nariz que tenía. Esos ojos color marrón pardo que me miraban y miraban sin cesar. Pude escuchar claramente las bocinas de los carros, de las motos, de los micros que iban y venían, podía escuchar también, las voces de algunos conductores imprudentes, gritándoles a un semáforo, como si éste fuera a escucharlos. Pude oler el perfume Insitant que se había echado Martha esa tarde. Un olor raro, un poco difícil de explicar, era como si yo cerrara los ojos y me encontrara en medio de un jardín lleno de flores, cuando de repente un olor fuerte a vainilla iba atrapando a uno de mis cinco sentidos y luego, al momento de abrir mis ojos podía observar esa maravillosa creación hecha por Dios. Abría y cerraba mis ojos a cada instante. Pensaba que era el mejor sueño de mi vida, y para mi suerte, Martha no era un sueño, Martha era mi realidad. Ella era esa mujer que yo podía ver, yo podía tocar, podía abrazarla, besarla, cuantas veces yo quisiera. Pero en ese momento, los dos, nos sentíamos como si fuésemos de otro planeta. Éramos dos seres extraños que estaban intercambiando pensamientos, ideas, sentimientos, con el solo hecho de mirarnos el uno al otro.
Ella llevaba puestos, unas zapatillas Vans de color azul, un pantalón negro, un polo blanco y un chaleco de jean. Se veía muy hermosa. Y lo mejor de todo era que esa niña convertida en mujer, estaba parada frente a mí. La podía mirar fijamente a sus ojos, unos hermosos ojos que tenía esa mujer la cual estaba parada frente a mí. ¡Qué hermosos ojos! ¡Qué hermosa...!
Después de haberla observado tanto tiempo, después de haberme dado cuenta de varias cosas, después de haber podido al fin descifrar su mirada. Pareciese que nuestros mundos se habían detenido por unos cuantos minutos, pareciera como si nos hubieras ausentado del mundo por unos cuantos minutos. Pareciese que el mundo que habitábamos, se había detenido por completo junto con el universo entero. Era como si nos hubiésemos perdido y la galaxia entera nos hubiese estado buscando.
La galaxia entera, nos buscaba y buscaba sin llegar a ningún resultado favorable. No podían encontrarnos, habíamos desaparecido totalmente de la faz de la tierra y ahora también, del universo y aún no nos podían encontrar, nos habíamos perdido Martha y yo, nos habíamos perdido en nuestras propias mirada. Nos besábamos. No parábamos de besarnos. Nos abrazábamos. Nos tocábamos, hablábamos y hablábamos con el solo hecho de quedarnos mirándonos a los ojos. No había palabra alguna que flotase en ese momento por el entorno que nos encontrábamos en ese momento. Ninguno de los dos se animaba a dar el siguiente paso, el paso de “La comunicación”, pareciese incluso que nuestras palabras se quedaban guardadas y no podían salir de aquel diccionario estancado en aquel librero de aquella pared que se encontraba ubicada en una casa de viejos recuerdos. Ese diccionario de la primera edición del año de Larousse del año 1851.
No sé si habían sido tantas las ganas que tenía de verla, que no podía ni siquiera yo hablar o ella que por el temor a mi reacción no sabía que decir. Estábamos tan callados que el ruido que hacíamos se asimilaba al ruido que podíamos escuchar en una noche de luna llena cuando caminamos cerca de un cementerio, el efecto era como si nuestras almas quisieran salirse de nuestro cuerpo y quisieran ser libres aunque sea por una vez en sus vidas. Libres de todo mal, alejado de toda esta contaminación de sentimientos que se alborotan, que nos confunden y que hasta nos deja sin habla. Tan callados estábamos que hasta podíamos oír los murmullos que dejaba la gente que iban y venían por esa transitada calle. Podíamos escuchar hasta el más mínimo ruido que podía haberse hecho en ese momento. Podíamos escuchar también el llanto de un niño que había sido provocado al no haberle comprado un juguete, escuchábamos también las conversaciones perdidas de personas que comentaban sobre la película que habían visto en el cine.
Pero lo que más me llamo la atención en ese momento, fue lo tan cerca que estaba con Martha que podía claramente escuchar sus latidos que salían de su pecho. Parecía tener el corazón de un colibrí, que late mil doscientas veces por minuto. Podía también escuchar el sonido que hacía ella, cada vez que pasaba saliva y era cada minuto con diecinueve segundos. Estábamos totalmente callados. Lo único que hacíamos era mirarnos y mirarnos. Aunque suene un poco extraño, de todas las conversaciones que he podido tener, podría jurar que esta era la conversación más hermosa, entretenida e interesante que haya tenido, porque: “No nos hablábamos, pero nos mirábamos; no nos besábamos, pero nos mirábamos; no nos abrazábamos, pero nos mirábamos”. Estar parados ahí, frente a frente, mirándonos el uno al otro, podíamos aparecer y desaparecer del mundo, cuantas veces queríamos y eso era lo que más me asombraba de ella, porque algo simple, lo podía convertir en algo tan complejo y maravilloso, en algo que es difícil de explicar.
Estaba callada. Después de varios días de angustia, después de varios días sin verla, después de pasarme días enteros esperando que llegara este momento. La espera por fin había llegado a su fin. Al fin la pude ver. Al observarla pude notar en ella, varias cosas diferentes, me di cuenta por ejemplo que le había salido un granito en la parte superior de su ojo izquierdo. Tenerla tan cerca a mí, pude también apreciar esa pequeña y perfilada nariz que tenía. Esos ojos color marrón pardo que me miraban y miraban sin cesar. Pude escuchar claramente las bocinas de los carros, de las motos, de los micros que iban y venían, podía escuchar también, las voces de algunos conductores imprudentes, gritándoles a un semáforo, como si éste fuera a escucharlos. Pude oler el perfume Insitant que se había echado Martha esa tarde. Un olor raro, un poco difícil de explicar, era como si yo cerrara los ojos y me encontrara en medio de un jardín lleno de flores, cuando de repente un olor fuerte a vainilla iba atrapando a uno de mis cinco sentidos y luego, al momento de abrir mis ojos podía observar esa maravillosa creación hecha por Dios. Abría y cerraba mis ojos a cada instante. Pensaba que era el mejor sueño de mi vida, y para mi suerte, Martha no era un sueño, Martha era mi realidad. Ella era esa mujer que yo podía ver, yo podía tocar, podía abrazarla, besarla, cuantas veces yo quisiera. Pero en ese momento, los dos, nos sentíamos como si fuésemos de otro planeta. Éramos dos seres extraños que estaban intercambiando pensamientos, ideas, sentimientos, con el solo hecho de mirarnos el uno al otro.
Ella llevaba puestos, unas zapatillas Vans de color azul, un pantalón negro, un polo blanco y un chaleco de jean. Se veía muy hermosa. Y lo mejor de todo era que esa niña convertida en mujer, estaba parada frente a mí. La podía mirar fijamente a sus ojos, unos hermosos ojos que tenía esa mujer la cual estaba parada frente a mí. ¡Qué hermosos ojos! ¡Qué hermosa...!
Después de haberla observado tanto tiempo, después de haberme dado cuenta de varias cosas, después de haber podido al fin descifrar su mirada. Pareciese que nuestros mundos se habían detenido por unos cuantos minutos, pareciera como si nos hubieras ausentado del mundo por unos cuantos minutos. Pareciese que el mundo que habitábamos, se había detenido por completo junto con el universo entero. Era como si nos hubiésemos perdido y la galaxia entera nos hubiese estado buscando.
La galaxia entera, nos buscaba y buscaba sin llegar a ningún resultado favorable. No podían encontrarnos, habíamos desaparecido totalmente de la faz de la tierra y ahora también, del universo y aún no nos podían encontrar, nos habíamos perdido Martha y yo, nos habíamos perdido en nuestras propias mirada. Nos besábamos. No parábamos de besarnos. Nos abrazábamos. Nos tocábamos, hablábamos y hablábamos con el solo hecho de quedarnos mirándonos a los ojos. No había palabra alguna que flotase en ese momento por el entorno que nos encontrábamos en ese momento. Ninguno de los dos se animaba a dar el siguiente paso, el paso de “La comunicación”, pareciese incluso que nuestras palabras se quedaban guardadas y no podían salir de aquel diccionario estancado en aquel librero de aquella pared que se encontraba ubicada en una casa de viejos recuerdos. Ese diccionario de la primera edición del año de Larousse del año 1851.
No sé si habían sido tantas las ganas que tenía de verla, que no podía ni siquiera yo hablar o ella que por el temor a mi reacción no sabía que decir. Estábamos tan callados que el ruido que hacíamos se asimilaba al ruido que podíamos escuchar en una noche de luna llena cuando caminamos cerca de un cementerio, el efecto era como si nuestras almas quisieran salirse de nuestro cuerpo y quisieran ser libres aunque sea por una vez en sus vidas. Libres de todo mal, alejado de toda esta contaminación de sentimientos que se alborotan, que nos confunden y que hasta nos deja sin habla. Tan callados estábamos que hasta podíamos oír los murmullos que dejaba la gente que iban y venían por esa transitada calle. Podíamos escuchar hasta el más mínimo ruido que podía haberse hecho en ese momento. Podíamos escuchar también el llanto de un niño que había sido provocado al no haberle comprado un juguete, escuchábamos también las conversaciones perdidas de personas que comentaban sobre la película que habían visto en el cine.
Pero lo que más me llamo la atención en ese momento, fue lo tan cerca que estaba con Martha que podía claramente escuchar sus latidos que salían de su pecho. Parecía tener el corazón de un colibrí, que late mil doscientas veces por minuto. Podía también escuchar el sonido que hacía ella, cada vez que pasaba saliva y era cada minuto con diecinueve segundos. Estábamos totalmente callados. Lo único que hacíamos era mirarnos y mirarnos. Aunque suene un poco extraño, de todas las conversaciones que he podido tener, podría jurar que esta era la conversación más hermosa, entretenida e interesante que haya tenido, porque: “No nos hablábamos, pero nos mirábamos; no nos besábamos, pero nos mirábamos; no nos abrazábamos, pero nos mirábamos”. Estar parados ahí, frente a frente, mirándonos el uno al otro, podíamos aparecer y desaparecer del mundo, cuantas veces queríamos y eso era lo que más me asombraba de ella, porque algo simple, lo podía convertir en algo tan complejo y maravilloso, en algo que es difícil de explicar.
EL TIEMPO SIGUE ARAÑANDO MI CORAZÓN:
El tiempo sigue arañando mi corazón sincero. Y no me apetece soltar más lágrimas que se sequen cuando se rompen en el suelo. No quiero sufrir más por estos sentimientos que me empujan a un vacío desconsolador, sin besos.
Estás en cada uno de mis sueños y en cada uno de mis anhelos. Estás en mis ilusiones y estás en mis miedos. Estás al final de mi camino, en el horizonte de mi deseo. Sin embargo yo quiero que estés aquí, en este momento. Y en todos los momentos. Y no te veo. No, no te veo.
¿Por qué es tan difícil? ¿Por qué no me atrevo a ir más allá de estos estúpidos textos? Tú sigues con tu vida y yo continúo mi paseo por la orilla de mi sombra que ocultan mi verdadero secreto.
Me encantaría que cogieras cada uno de los pedazos de mi corazón y los acariciaras haciéndolos tuyos. Quiero ser para ti y que me quieras tanto que duela al dolor. Un agridulce dolor. Ojalá fuera así. Ojalá me atreviera a robarte un beso y mirar el futuro en un mismo espejo. Un futuro de la mano, sin miedos.
No sé qué hacer, cómo hablarte, qué decirte. Si me atreviera a contarte como pienso, como amo, como deseo, como quiero... Si me atreviera a buscar en tus ojos lo que tanto y tanto y tanto causa mi sufrimiento. Da lo mismo, porque esto seguirá así porque soy cobarde. Soy incapaz de atreverme a revelar mi auténtico yo. Soy como una tortuga pequeña en medio del desierto. Sin agua, sin fuerzas, sin seso. Dentro de un caparazón demasiado pequeño del que no sé salir, en el que poco a poco me muero. Necesito razones y tu mano para tirar de mí y demostrar al mundo que existo. Que existimos. Aunque siga en pleno desierto. Ojalá tuviera poderes mágicos y pudiera concederme a mí misma un deseo. Me conformo con un deseo. Pedir un beso tuyo. Y es que necesito un beso para saber que todo por lo que me estoy muriendo merece la pena. Porque tú lo eres todo y, sin ti, no me quedará el más mínimo recuerdo.
jueves, 29 de agosto de 2013
(29/08/2013) 2:30am
HOY ES 29:Hoy es 29 de Agosto del año dos mil trece, siendo exactamente las dos y media de la madrugada decidí escribirte unas cuántas líneas mas para el recuerdo, no sé si estoy haciendo bien al recordarte, no sé si hago bien al pensarte todos estos días. Todos los días me estoy quedando hasta altas horas de la noche, llego ha pasar las horas de las madrugadas y no desperdicio el tiempo, no, no, jamás desperdiciaría mi tiempo. Si te pienso es porque tengo miles de razones para hacerlo, tengo razones que ni yo mismo me explico de donde salen.
"Si dos personas estás destinados a estar juntos por siempre, pase lo que pase, terminaran juntas"
Pero analizando bien las cosas, creo que ese es nuestro problemas, queremos estar juntos, o bueno, tal vez solo por mi parte.
Tus palabras esa mañana de un sábado, cuando decidí alzar el teléfono para poder escuchar tu voz después de unos meses de ausencia, tus palabras fueron claras y sencillas. Más claras ya no podían estar. Sueño con algún día, con coger tu mano y caminar contigo frente a la playa, pero soñar no cuesta nada, lo que cuesta es levantarse, pararse y pensar si vale la pena arriesgarse. "Darlo todo o tirarlo todo por la borda por un sueño ya casi inalcanzable" O pinto una ilusión que esta sorda, por mas que quiera ya no se detendrá el tiempo, ya no hay marcha atrás, las agujas del reloj avanzan, nos separan y la distancia me amenaza haciéndome botar lágrimas, lágrimas de esperanzas al recordar las madrugadas del ayer. Cuando el dolor se me quedo prisionero en mi corazón, los días sin ti, me golpean y me empujan a un lugar oscuro dentro de esta habitación que tiene como atmósfera, esas madrugadas contigo. Quiero saltar, pero solo arrastro los pies, busco una luz para poder avivar mi fe, no sé cual es mi misión en esta vida, solo se que aya afuera hay un mar abierto y solo quiero sanar mis heridas. Llévate mejor las llaves de mi recuerdo, sueño con que me pierdo fuera de este cuerpo. ¿Que traman los astros al dibujar mi rostro? Solo me llevo por tu rastro, al poder sentir algunos rayos de sol en este mes de Agosto. Mis sentimientos están perdidos en esta enfermedad llamada "Madrugadas del ayer", quiero que el viento me lleve lejos. Solo soy una persona diferente cuando me miro al espejo, soy un Dios cuando sueño y un mendigo cuando despierto, en mi interior hay una brújula que apunta al presente porque ahora sin ti, mi futuro esta incierto.Cada día se me hace más duro despertar, por eso no duermo y me quedo enfangado en las madrugadas del ayer, tratando de reconstruirlas con tu recuerdo. ¿De que sirve pensar en la felicidad?, si estar sin ti, toda mi felicidad se desmorona. Me asomo a la ventana y veo que esta lloviendo, ahora solo me queda darle vida a estos papeles que hablo de ti, que antes no tenían sentido. Pienso en mi vida darle algún sentido, pienso en retirarme, pero hay una voz dentro de mi que me dice: Erick, la esperanza aun no muere, no dejes de luchar por lo que mas amas, el mundo gira contigo, y tu mundo es ella.
Pero si el mundo gira conmigo, entonces porque me siento solo, porque a veces siento que respiro debajo del lodo, porque lloro, porque arrastro un cuerpo triste y cansado, ¿Porque?, porque las ilusiones poco a poco se van escapando de mis manos. No quiero seguir escribiendo, empiezo a sentir miedo y a extrañarte mas, aunque yo para ti yo ya este muerto. Aun hay un sentimiento guardado dentro de mi, por ti, hacia ti. Me invade la obsesión de abandonar este mundo, pero vuelvo a recordar que en esta vida, tu eres mi mundo. Todos los días te escribo, escribo porque pienso que regresarás, tal vez pienso demás, pero pensar demás no esta demás.
Terminaré estas líneas vacías y sin sentido con una pequeña canción:
No digas nada por favor,
que sabes bien como soy yo
y creo que sobran las palabras.
No digas nada ya lo se,
aunque tienes frió también
y veo que ahí fuego en tu mirada.
Y es verdad, que la vida algunas veces,
nos hace pagar con creces y que el tiempo siempre tiene la razón,
que al final, cuando algo te pertenece,
un día inesperado vuelve y aunque sea de lejos oye tu canción.
No digas nada por favor, que hablando el alma me destrozas,
quiero decirte tantas cosas, quiero acordarme de tu olor,
no digas nada por favor, no vaya a ser que me despierte,
de un sueño en el que puedo verte, y aun puedo hablarte de mi amor
no digas nada ten piedad, solo te pido que mañana por la noche,
dormido me des la oportunidad.
Dormido se que es el amor
y aunque te vea de otro color,
otra vez puedo enamorarte,
Puedo decirte la verdad,
y aunque a mi lado ya no estas,
dormida aun puedo mirarte.
Y es verdad, que la vida algunas veces,
nos hace pagar con creces y que el tiempo siempre tiene la razón,
que al final, cuando algo te pertenece,
un día inesperado vuelve y aunque sea de lejos oye tu canción.
No digas nada por favor, que hablando el alma me destrozas,
quiero decirte tantas cosas, quiero acordarme de tu olor,
no digas nada por favor, no vaya a ser que me despierte,
de un sueño en el que puedo verte, y aun puedo hablarte de mi amor
no digas nada ten piedad, solo te pido que mañana por la noche,
dormido me des la oportunidad.
No digas nada ten piedad, solo te pido que mañana por la noche, dormido me des la oportunidad.
https://www.youtube.com/watch?v=ZJx6nuTkz5M
"SÉ QUE SOY UN IDIOTA AL ESPERARTE, PORQUÉ SE QUE NO VENDRÁS"
viernes, 16 de agosto de 2013
Y algún día estaré así, con la mujer que ame, parados frente a frente en una iglesia en el altar, escuchando al padre que da la oración, el cuál nos abrirá una nueva puerta hacia un futuro juntos, donde crearemos un nuevo mundo, que con el pasar del tiempo escucharemos pequeñas risitas y pequeñas huellas que correrán por todo el pasadizo de la casa. Algún día compartiré mi vida con una persona, nose como se llamará, nose como la conoceré, pero el día que la conozca por completo sabre que mi futuro y mi destino ya esta escrito.
Algún día caminaré con ella agarrados de la mano frente al mar, observando un lindo atardecer, algún día no muy lejano sería de lo mas bonito tomarnos de la mano y besarnos frente a los demás, y comer fresas con leche condensada y luego escaparnos de la rutina e ir a una casa de campo y ella que prepare café mientras yo voy prendiendo la chimenea para poder calentarnos y después tender una sábana en el piso, cerca de la chimenea & que podamos mirarnos y besarnos con las miradas nuestras, y después subir a la terraza y mirar las constelaciones del cielo & después comparar las estrellas con tu infinita belleza, creo que en esa lucha ganarías tú, y después seguir mirándonos & decirte lo mucho que te quiero.
Que hermosa sería una vida asi, con la mujer que ame; nose con quien me casaré en el futuro (en el presente estoy solo y ya voy más de 11 meses con esta soledad que poco a poco me mata), pero que lindo seria casarme con la mujer que amo, ese sería mi mas grande sueño, que espero algún día realizarlo.
Algún día caminaré con ella agarrados de la mano frente al mar, observando un lindo atardecer, algún día no muy lejano sería de lo mas bonito tomarnos de la mano y besarnos frente a los demás, y comer fresas con leche condensada y luego escaparnos de la rutina e ir a una casa de campo y ella que prepare café mientras yo voy prendiendo la chimenea para poder calentarnos y después tender una sábana en el piso, cerca de la chimenea & que podamos mirarnos y besarnos con las miradas nuestras, y después subir a la terraza y mirar las constelaciones del cielo & después comparar las estrellas con tu infinita belleza, creo que en esa lucha ganarías tú, y después seguir mirándonos & decirte lo mucho que te quiero.
Que hermosa sería una vida asi, con la mujer que ame; nose con quien me casaré en el futuro (en el presente estoy solo y ya voy más de 11 meses con esta soledad que poco a poco me mata), pero que lindo seria casarme con la mujer que amo, ese sería mi mas grande sueño, que espero algún día realizarlo.
jueves, 15 de agosto de 2013
TU NOMBRE EN ESTA CELDA ERA OSCURIDAD, TU NOMBRE EN EL CIELO ERA COMO BRILLAS, PERO DESDE TU AUSENCIA, TU NOMBRE AHORA PARA MÍ, ES : LIBERTAD
PARA: M. D. P. A. H.
Y el año pasado, exactamente un 29 de diciembre. Me preguntaba a mi mismo. ¿Qué me pasaba?, sabiendo que yo no era anda, decidí arriesgar todo por ella, lo que más anhelaba.
Después de toda la felicidad que pude obtener, caí junto a todos mis pensamientos, abandonando promesas incalculables que había hecho con ella, en la cuál yo esperaba encontrar mi felicidad solo con ella y nadie más.
Pero la decepción hundió al afecto, pateó fuertemente mis sentimientos y cuando ella me decía "Te Quiero", ahí estaba yo, soñando de nuevo.
Pero, después de un tiempo, aprendí la sutil diferencia entre "Sostener una mano" y "Encadenar un alma en contra de su voluntad". Yo hacia lo segundo, para ella, yo ya no existía, pero yo por terco o porque en verdad me enamoré de ella, la seguí encadenando conmigo, hasta hace unos años convertidos en días.
Acepté mi derrota con la cabeza en alto y mis ojos bien abiertos. Nuestro futuro juntos, se había desmoronado por la mitad, intenté repararlo, reconstruirlo, pero mis intentos fueron siempre en vano, ya que ella no pensaba lo mismo.
Con el pasar del tiempo pude comprender que sólo quien es capaz de amarte con tus virtudes y defectos, sin pretender cambiarte, puede brindarte toda la felicidad que deseas.
En realidad con el tiempo, todos los seres humanos, incluido yo, obviamente. Te das cuenta de que si estás al lado de esa persona sólo por acompañar tu soledad, irremediablemente acabarás no deseando volver a verla, yo nunca la vi, y eso es lo que me paso, ya no la recuerdo, ya no sé quien es, ya no reconocería su voz si ella me volviese a hablar, si la viera en la calle no la podría reconocer, me olvidé casi totalmente de ella, ya no recuerdo sus rasgos físicos, ni sus sentimiento. Y digo que me olvide de ella casi totalmente de ella, es porqué lo único que me hace acordar de ella, son las madrugadas del ayer, las tantas veces que lloré por ella, las madrugadas aquellas que pasaba esperando un mensaje o una señal por parte de ella.
Hasta ahora no entiendo cuál fue la causa de su abandono, esas veces que hablábamos estaba molesta, sabía la razón de su enojo, pero ella lo había entendido de otra forma, sus palabras que me dijo, lo dijo en un momento de ira, nos separamos, así como se separan las personas en su debido tiempo. El perdonar es solo de almas grandes.
Me di cuenta que fui la persona mas feliz del mundo con ella, nunca pero nunca en mi vida me había sentido así. Cuando era pequeño me daban regalos, mi mamá me daba sorpresas y también me sentía feliz pero eso solo era una felicidad pasajera. Pero lo que viví con ella, es una felicidad que hasta el día de hoy me la produzco yo mismo, al sumergirme en este océano de recuerdos.
Yo quería parar el tiempo, con tus ojos viéndome, con las ganas de quedarme así abrazándome.
(http://www.youtube.com/watch?v=ls_bn61a22Y)
Pero ya no es momento de querer, sino de cambiar.
Es por eso, para que nunca la pueda olvidar, escribo siempre en base a las madrugadas. Ya se volvió una costumbre para mí creo.
Ahora soy feliz y se que estoy soltero, porque llevo más de 11 meses sin estar en una relación con alguien. Y diría que nunca me sentiría solo, porque quiera o no, las madrugadas me hacen compañía, tengo a personas maravillosas en mi vida, que son mis amigos y en especial, mis padres.
"PERO AUN QUESEA FELIZ CON LAS PERSONAS QUE ESTÁN A MI LADO, AÑORARÉ TERRIBLEMENTE POR SIEMPRE, A LA PERSONA QUE EN LAS MADRUGADAS DEL AYER SIEMPRE ESTUVO CONMIGO PERO QUE HOY SE HA MARCHADO".
->Te agradezco por haber llegado a mi vida, por haber puesto todos mis sentimientos en una cajita de madera y llevártela sin decir algo.
"Al principio todo comenzó con palabras y al final, las palabras acabaron con todo"
Te fuiste y no alcancé a decirte lo mucho que te quiero, nunca te vi, pero mi memoria te dibujaba tal y como eres, a la perfección. Todo esto me parece un sueño, pero se que es aureola de tarde, aureola de tarde que aun no desvanece. Y si, seguiré escribiendo en nombre de aquellas madrugadas que fallecieron, pero no por ti porque ya te fuiste, no, no, sino por mi, para poder vivir libremente y con la memoria tranquila, pero no me engañaré más, no me mentiré más. Nunca supiste en realidad quien yo era, no yo sabía quien eras tú, aun no logro conocerte bien, creo que nunca lograré conocerte a la perfección.
"EL VERDADERO AMOR NO SE REDUCE A LO FÍSICO, A LO MATERIAL O A LO ROMÁNTICO; EL VERDADERO AMOR ES LA ACEPTACIÓN DE DEFECTOS, VIRTUDES, DE TODO LO QUE LA OTRA PERSONA ES, DE LO QUE HA SIDO, DE LO QUE SERÁ Y DE LO QUE YA NUNCA PODRÁ SER"
PARA: M. D. P. A. H.
Y el año pasado, exactamente un 29 de diciembre. Me preguntaba a mi mismo. ¿Qué me pasaba?, sabiendo que yo no era anda, decidí arriesgar todo por ella, lo que más anhelaba.
Después de toda la felicidad que pude obtener, caí junto a todos mis pensamientos, abandonando promesas incalculables que había hecho con ella, en la cuál yo esperaba encontrar mi felicidad solo con ella y nadie más.
Pero la decepción hundió al afecto, pateó fuertemente mis sentimientos y cuando ella me decía "Te Quiero", ahí estaba yo, soñando de nuevo.
Pero, después de un tiempo, aprendí la sutil diferencia entre "Sostener una mano" y "Encadenar un alma en contra de su voluntad". Yo hacia lo segundo, para ella, yo ya no existía, pero yo por terco o porque en verdad me enamoré de ella, la seguí encadenando conmigo, hasta hace unos años convertidos en días.
Acepté mi derrota con la cabeza en alto y mis ojos bien abiertos. Nuestro futuro juntos, se había desmoronado por la mitad, intenté repararlo, reconstruirlo, pero mis intentos fueron siempre en vano, ya que ella no pensaba lo mismo.
Con el pasar del tiempo pude comprender que sólo quien es capaz de amarte con tus virtudes y defectos, sin pretender cambiarte, puede brindarte toda la felicidad que deseas.
En realidad con el tiempo, todos los seres humanos, incluido yo, obviamente. Te das cuenta de que si estás al lado de esa persona sólo por acompañar tu soledad, irremediablemente acabarás no deseando volver a verla, yo nunca la vi, y eso es lo que me paso, ya no la recuerdo, ya no sé quien es, ya no reconocería su voz si ella me volviese a hablar, si la viera en la calle no la podría reconocer, me olvidé casi totalmente de ella, ya no recuerdo sus rasgos físicos, ni sus sentimiento. Y digo que me olvide de ella casi totalmente de ella, es porqué lo único que me hace acordar de ella, son las madrugadas del ayer, las tantas veces que lloré por ella, las madrugadas aquellas que pasaba esperando un mensaje o una señal por parte de ella.
Hasta ahora no entiendo cuál fue la causa de su abandono, esas veces que hablábamos estaba molesta, sabía la razón de su enojo, pero ella lo había entendido de otra forma, sus palabras que me dijo, lo dijo en un momento de ira, nos separamos, así como se separan las personas en su debido tiempo. El perdonar es solo de almas grandes.
Me di cuenta que fui la persona mas feliz del mundo con ella, nunca pero nunca en mi vida me había sentido así. Cuando era pequeño me daban regalos, mi mamá me daba sorpresas y también me sentía feliz pero eso solo era una felicidad pasajera. Pero lo que viví con ella, es una felicidad que hasta el día de hoy me la produzco yo mismo, al sumergirme en este océano de recuerdos.
Yo quería parar el tiempo, con tus ojos viéndome, con las ganas de quedarme así abrazándome.
(http://www.youtube.com/watch?v=ls_bn61a22Y)
Pero ya no es momento de querer, sino de cambiar.
Es por eso, para que nunca la pueda olvidar, escribo siempre en base a las madrugadas. Ya se volvió una costumbre para mí creo.
Ahora soy feliz y se que estoy soltero, porque llevo más de 11 meses sin estar en una relación con alguien. Y diría que nunca me sentiría solo, porque quiera o no, las madrugadas me hacen compañía, tengo a personas maravillosas en mi vida, que son mis amigos y en especial, mis padres.
"PERO AUN QUESEA FELIZ CON LAS PERSONAS QUE ESTÁN A MI LADO, AÑORARÉ TERRIBLEMENTE POR SIEMPRE, A LA PERSONA QUE EN LAS MADRUGADAS DEL AYER SIEMPRE ESTUVO CONMIGO PERO QUE HOY SE HA MARCHADO".
->Te agradezco por haber llegado a mi vida, por haber puesto todos mis sentimientos en una cajita de madera y llevártela sin decir algo.
"Al principio todo comenzó con palabras y al final, las palabras acabaron con todo"
Te fuiste y no alcancé a decirte lo mucho que te quiero, nunca te vi, pero mi memoria te dibujaba tal y como eres, a la perfección. Todo esto me parece un sueño, pero se que es aureola de tarde, aureola de tarde que aun no desvanece. Y si, seguiré escribiendo en nombre de aquellas madrugadas que fallecieron, pero no por ti porque ya te fuiste, no, no, sino por mi, para poder vivir libremente y con la memoria tranquila, pero no me engañaré más, no me mentiré más. Nunca supiste en realidad quien yo era, no yo sabía quien eras tú, aun no logro conocerte bien, creo que nunca lograré conocerte a la perfección.
"EL VERDADERO AMOR NO SE REDUCE A LO FÍSICO, A LO MATERIAL O A LO ROMÁNTICO; EL VERDADERO AMOR ES LA ACEPTACIÓN DE DEFECTOS, VIRTUDES, DE TODO LO QUE LA OTRA PERSONA ES, DE LO QUE HA SIDO, DE LO QUE SERÁ Y DE LO QUE YA NUNCA PODRÁ SER"
miércoles, 14 de agosto de 2013
PARA: M. D. P. A .H. (El recuerdo de aquella madrugada que se esfumó)
Recuerdo la primera vez que te escribí. Fue exactamente las diez y media de la noche de un venti-nueve de diciembre del año dos mil doce. Fue la primera vez que noté que me mirabas. Bueno, a mí no. A mis letras.
"ME LEÍAS"
¿Quién pensaría que tú estás dentro de todas mis letras?, dime, ¿Quién lo pensaría?. Nadie. Ni si quiera Tú lo notas. Ahora que todo acabó. Que una vez a las quinientas nos cruzamos unas cuántas palabras por educación; ¿Qué pensarías si supieras que aún te escribo?, Ya intenté que lo supieras, pero eso a ti no te importa. Démosle un fuerte abrazo al "Orgullo", que gracias a él, o bueno, en realidad, no sé si fue gracias a él o gracias a ti, que tu cariño hacia mi, con el tiempo se esfumó, si, algo así, como el humo de aquel cigarro "Lucky Convertible" que me olvide fumar en tu nombre.
Te digo algo y todo te molesta. Hace poco leí una frase que decía lo siguiente: "A VECES ES MEJOR RETIRARNOS Y DEJAR UN BONITO RECUERDO, QUE SEGUIR INSISTIENDO Y CONVERTIRSE EN UNA MOLESTIA". Sé que todo termino y ¿Esa es la ley de la vida, no?
"TODO LO QUE MÁS TE HACE FELIZ, VIENE POR CORTO TIEMPO, SOLO HAY QUE SABERLO APROVECHAR" . Eso es cierto, yo no sabía que tu estadía conmigo iba a durar poco tiempo, si lo hubiera sabido, créeme que hubiera comprado el tiempo para poder detenerlo. Además poniendo un poco en práctica la razón, Tú no eras mía, ni yo era tuyo (Aunque a veces solíamos decirnos), ¿Es raro no?, yo aquí escribiéndote como un loco escritor a punto de entrar a la locura. Y tu, en una parte del mundo, estando quizás con alguien, burlándote de mis letras. En realidad, somos tan distintos el uno del otro. Yo pienso en un mundo contigo y tu pensabas en el "Que dirán los demás". Y aunque suene raro, eso me encantaba, eso me atraía, así como me atrae el olor a gasolina, el olor a ropa nueva. Sé que a parte de nosotros, hay más personas esperando por nosotros. Pero podemos seguir siendo dos.
Te pienso más de lo que debería pensarte.
Te imagino más de lo que te escribo, quizás ese sea uno de mis peores virtudes.
Te quiero más de lo que un ciego pueda querer, que es ver. Verte a ti, agarrada de mi mano.
Y no tengo miedo de mí, ni de regalarte mis letras, el universo quizás no conspiro a nuestro favor. Pero me duele más no poder gritar tu nombre en medio de este silencio. O ya se, quizás te sueño en las madrugadas que me hundo en tus pensamientos y aunque suene raro, ahí es el único lugar donde puedo yo verme.
No te tengo miedo a ti. Tampoco tengo miedo a tu desprecio. Lo que le tengo miedo es al recuerdo de aquellas madrugadas vacías y somnolientas. Le tengo miedo al miedo de tu recuerdo. Le tengo miedo a tu ausencia. Solo parezco un viento que vuela en el aire sin destino.
Tengo miedo de nosotros.
Pero, ¿Qué pasará el día en que yo de costumbre te siga escribiendo y tu por alguna razón de Dios, se te ocurra responderme, que me dirás?, ¿Qué me responderás? No lo sé la verdad, solo se que quiero despertar de esta maldita pesadilla y poder volver a tenerte en la ausencia d mis deseos.
Pero seré fuerte y no me rendiré.
SE ME CAE EL CIELO DE TANTO ESPERAR.
Recuerdo la primera vez que te escribí. Fue exactamente las diez y media de la noche de un venti-nueve de diciembre del año dos mil doce. Fue la primera vez que noté que me mirabas. Bueno, a mí no. A mis letras.
"ME LEÍAS"
¿Quién pensaría que tú estás dentro de todas mis letras?, dime, ¿Quién lo pensaría?. Nadie. Ni si quiera Tú lo notas. Ahora que todo acabó. Que una vez a las quinientas nos cruzamos unas cuántas palabras por educación; ¿Qué pensarías si supieras que aún te escribo?, Ya intenté que lo supieras, pero eso a ti no te importa. Démosle un fuerte abrazo al "Orgullo", que gracias a él, o bueno, en realidad, no sé si fue gracias a él o gracias a ti, que tu cariño hacia mi, con el tiempo se esfumó, si, algo así, como el humo de aquel cigarro "Lucky Convertible" que me olvide fumar en tu nombre.
Te digo algo y todo te molesta. Hace poco leí una frase que decía lo siguiente: "A VECES ES MEJOR RETIRARNOS Y DEJAR UN BONITO RECUERDO, QUE SEGUIR INSISTIENDO Y CONVERTIRSE EN UNA MOLESTIA". Sé que todo termino y ¿Esa es la ley de la vida, no?
"TODO LO QUE MÁS TE HACE FELIZ, VIENE POR CORTO TIEMPO, SOLO HAY QUE SABERLO APROVECHAR" . Eso es cierto, yo no sabía que tu estadía conmigo iba a durar poco tiempo, si lo hubiera sabido, créeme que hubiera comprado el tiempo para poder detenerlo. Además poniendo un poco en práctica la razón, Tú no eras mía, ni yo era tuyo (Aunque a veces solíamos decirnos), ¿Es raro no?, yo aquí escribiéndote como un loco escritor a punto de entrar a la locura. Y tu, en una parte del mundo, estando quizás con alguien, burlándote de mis letras. En realidad, somos tan distintos el uno del otro. Yo pienso en un mundo contigo y tu pensabas en el "Que dirán los demás". Y aunque suene raro, eso me encantaba, eso me atraía, así como me atrae el olor a gasolina, el olor a ropa nueva. Sé que a parte de nosotros, hay más personas esperando por nosotros. Pero podemos seguir siendo dos.
Te pienso más de lo que debería pensarte.
Te imagino más de lo que te escribo, quizás ese sea uno de mis peores virtudes.
Te quiero más de lo que un ciego pueda querer, que es ver. Verte a ti, agarrada de mi mano.
Y no tengo miedo de mí, ni de regalarte mis letras, el universo quizás no conspiro a nuestro favor. Pero me duele más no poder gritar tu nombre en medio de este silencio. O ya se, quizás te sueño en las madrugadas que me hundo en tus pensamientos y aunque suene raro, ahí es el único lugar donde puedo yo verme.
No te tengo miedo a ti. Tampoco tengo miedo a tu desprecio. Lo que le tengo miedo es al recuerdo de aquellas madrugadas vacías y somnolientas. Le tengo miedo al miedo de tu recuerdo. Le tengo miedo a tu ausencia. Solo parezco un viento que vuela en el aire sin destino.
Tengo miedo de nosotros.
Pero, ¿Qué pasará el día en que yo de costumbre te siga escribiendo y tu por alguna razón de Dios, se te ocurra responderme, que me dirás?, ¿Qué me responderás? No lo sé la verdad, solo se que quiero despertar de esta maldita pesadilla y poder volver a tenerte en la ausencia d mis deseos.
Pero seré fuerte y no me rendiré.
SE ME CAE EL CIELO DE TANTO ESPERAR.
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